Los motores eléctricos son poderosos aliados en nuestra vida diaria, pero a veces pueden enfrentar un desafío importante.El exceso de carga o sobreexcitación puede ser una de las principales razones detrás de los motores eléctricos que se queman. Cuando estos motores se ven sometidos a una demanda excesiva, su temperatura puede elevarse rápidamente, poniendo en riesgo su funcionamiento adecuado.Pero eso no es todo. Otros factores, como la falta de lubricación adecuada, obstrucciones en la ventilación o incluso un diseño deficiente, pueden contribuir al calentamiento excesivo de los motores eléctricos.