Falla en la Mira es una serie de artículos sobre historias de empresas como Embraer, Ahlstrom Munksjo, AmstedMaxion, BHS Corrugated, entre otras, que implementaron nuestra solución y evitaron fallas inesperadas en máquinas y paradas en procesos de producción.
UNA JORNADA LLENA DE LECCIONES
La multinacional Yara Fertilizantes, fue una de las primeras en instalar los sensores de vibración de TRACTIAN. Gracias a esa jornada que tuvimos con ellos, pudimos por primera vez testear y probar la resistencia de los sensores en ambientes extremadamente agresivos. Durante el tiempo en que los sensores estuvieron recogiendo datos, fueron constantemente expuestos a varios elementos adversos como: una atmósfera corrosiva, polvo en exceso, humedad y calor. A pesar de las condiciones tan agresivas, los sensores funcionaron normalmente.
Quedamos muy satisfechos con todas las lecciones que aprendimos durante el tiempo en el que estuvimos supervisando los activos. Sobre todo la confianza que logramos en este trabajo desarrollado bajo la supervisión de Péricles Sousa.
Este ingeniero industrial, es el responsable de supervisar la implementación de soluciones de mantenimiento y su equipo gestiona además de esta planta, otras cuatro plantas de la corporación. ¡A continuación podrás ver más detalles de la experiencia de Yara con TRACTIAN!
LOS INSIGHTS QUE MARCAN LA DIFERENCIA
Antes del monitoreo de Tractian, la planta ya realizaba el monitoreo de la vibración con otros sistemas. La principal diferencia de este sistema con el de Tractian era que no existía la posibilidad de enviar notificaciones en tiempo real a los responsables de mantenimiento, ni tampoco contaba un sistema inteligente que interpretara los datos e indicara la causa posible de la falla.
La plataforma de Tractian aprendía del comportamiento de nuestros activos. Eso fue un factor determinante en el monitoreo de los ventiladores de la torre de enfriamiento, que constantemente presentaban fallas. Con cada aumento expresivo en los índices de vibración, conseguimos anticiparnos a la falla.
La plataforma aprende de la siguiente manera: la primera notificación de cada activo que es enviada al cliente, es el ADN de Vibración del Equipo. Este ADN es generado después de casi dos semanas de recogida de datos de los sensores y es específico a cada activo (por eso el nombre de ADN). Considera parámetros como la velocidad RMS, la aceleración media y armónicos de vibración. A partir de esta, son definidos los límites del comportamiento patrón del activo:
GESTIÓN 4.0 – EL GRAN CAMBIO GENERADO POR EL MONITOREO ONLINE
Escoger los activos que serían monitorizados en la planta fue estratégico, porque incluyó los que son mucho más críticos a la hora de producción, como el caso de un soplador de un molino. Con la ayuda de nuestras notificaciones, Péricles comenta que fue posible identificar y planear cuál debería ser la frecuencia entre los ciclos de limpieza y de inspección de los activos: “Cada determinado número de días recibíamos la misma alerta de aumento de vibración, fue así como notamos que deberíamos adecuar nuestra rutina de limpieza”.
El acceso en tiempo real a los datos de los activos logró evitar mantenimientos correctivos.
Cada activo crítico de la línea de producción monitoreado podría causar gran impacto en los resultados, son producidos 70 toneladas de fertilizantes por hora (equivalente a 323.772,93 Mdp/hora). Indagando más detalles de cómo Tractian cambió su rutina, él relata: “Basándonos en las notificaciones, logramos mejorar mucho nuestro plan de paradas. Algunas veces adelantamos una parada programada, cuándo la situación del activo estaba más crítica, o directamente juntábamos varias actividades distribuidas en la semana en una sola, para resolver algún problema indicado en la plataforma”.
Él cuenta que en la torre de enfriamiento, hubo una notificación de vibración y, por medio de esta, detectaron que había una hélice rota, mucho antes que generara problemas mayores. En otra situación, la plataforma notificó una anomalía en la vibración de un booster del soplador, haciendo que ellos se pudieran organizar para corregir una falla en el sistema de lubricación.
Los resultados más interesantes se pueden resumir en el hecho de que cuando Tractian estuvo monitoreando los activos, no hubo mantenimientos correctivos registrados. Por ejemplo, en el molino que estaba siendo monitoreado, un desalineamiento en el eje del cojinete fue corregido anticipadamente gracias al envío de una alerta de la plataforma.
Las actividades realizadas en la planta de Yara, probaron los beneficios del monitoreo online e hicieron que en este año aumentara el número de sensores de 5 a 15, con un gran potencial de incluir, en un futuro cercano, los sensores en otras plantas de México.
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